sábado, 27 de diciembre de 2008

GLAMOUR

Cuando suelta el micro, Sonia piensa en Victoria Beckham y el glamour. Después abandona la pandereta junto al amplificador, ingeniosamente colocado sobre un carrito con ruedas, y la cambia por la gorra con la que pasa a pedir:

-Un ayuda por favorrr.

Goran continúa ejecutando sus torpes armonías sonoras con el acordeón, escondido tras el repetitivo ritmo de los altavoces.

Se ha puesto un chándal rojo para estar cómoda. Aunque le sigue resultando imposible deshacerse de los zapatos de tacón que Goran le regaló pese al daño que le hacen al caminar. Cuando circula por entre los viajeros, pone esa triste y dulce mirada melancólica de las eslavas, violácea y difuminada. Al llegar al final del vagón se gira a observarle. Es tan guapo. Si no hubiera sido tan guapo no hubiera huido con él. Ni habría recorrido media Europa durmiendo en albergues de mala muerte, camas calientes o simplemente al raso. Lugares ajenos a sus sueños de escaparate.

sábado, 13 de septiembre de 2008

SUSURROS

Beatriz, insegura, atiende la llamada de su teléfono móvil. Es él. Intenta afinar su tono de voz más cálido, ese susurro suave de mujer sugerente que, unido a sus caídas de ojos y sus pucheros, suele volver locos a los hombres. Las miradas golosas de un macho con el que se cruza por la calle mientras sigue hablando aumentan su autoconfianza. Esos dos cristalinos se convierten en los espejos que le recuerdan su envidiable altura, la belleza no convencional de su melena, lo clásico de sus torneadas piernas, su figura atlética y la naturaleza enigmática de su sonrisa. Es consciente del aumento de seguridad cuando él, al otro lado del aparato y con palabras entrecortadas, la invita a cenar. Entonces responde sin acelerarse.

-Vale. ¿Por qué no?

Y satisfecha, se alegra al confirmar que una vez más ha conseguido que su voz oculte esa inseguridad, ese miedo a no gustar. Ese terror atroz a dejar de ser el centro de atención que le persigue desde niña, desde que su padre las abandonó.

jueves, 26 de junio de 2008

ESPERANZA


El desaseado vagabundo se pone a caminar con decisión alejándose de sus amigos, los yonquis y buscavidas de la playa. Yo pienso que se dirige a mi encuentro. O más concretamente, al encuentro del objetivo de mi cámara que, creo, ha vislumbrado con su legañosa ojeada. Y me asusto.

Pero es un amago. Cuando, frente a las duchas, realiza un etílico giro de noventa grados y golpea impulsivamente el pulsador en un arrebato de genialidad, millares de gotas acaban circulando por sus calurosas y mugrientas ropas velozmente. El refrescante flujo recorre los enguedejados bucles de su barba y la esperanza, en forma de frescor veraniego, inunda toda la imagen.




jueves, 22 de mayo de 2008

LISTA DE LA COMPRA

Detergente líquido para ropa de color (CUIDADO EN LA ELECCIÓN, PRIMERA LAVADORA DE COLOR).

Leche de soja contra el colesterol, 5 tetrabriks.

Yogur natural, 1 pack.

Cerveza, 6 packs al menos.

Tomate frito, 2 latas.

Espaguetis, 2 paquetes.

Atún claro, 2 packs.

Pan de molde (para largas noches solitarias), 1 paquete.

Agua, garrafa 8 litros.

Helado de chocolate belga (a Laura le funcionaba), 10 litros.

Croquetas congeladas, 2 paquetes.

Judías verdes congeladas, 1 paquete.

Merluza congelada, 1 paquete.

Amor congelado.

Whisky J&B, dos botellas.

Coca-Cola (¿y una sonrisa?), 2 packs.

Gel de ducha Axe, aroma muy masculino.

Condones Durex (nunca se sabe), un paquete.

DVD vírgenes, 1 pack.

Televisor nuevo, más grande, mucho más grande, pantalla panorámica.

Valeriana, pastillas, 1 caja.

Amnesia.

Lavavajillas (hasta que traigan el lavaplatos).

Escoba.

Mocho.

Cubo para fregar el suelo.

Estropajo.

Don Limpio.

Papel de váter.

Bolsas de basura.

Suavizante (mamá, al teléfono, dice que es necesario al poner lavadoras ¿?).